Jorge Fandermole elabora su repertorio con precisión y preciosismo. Artesano de la canción, el compositor, cantante y guitarrista nacido en Andino sabe que los tiempos del mercado empujan urgencias que no van a tono con su concepción artística. Así, cada nuevo lanzamiento musical de Fandermole es un suceso digno de ser celebrado. Y eso es lo que sucederá el próximo sábado 29 de noviembre en el Teatro de Plataforma Lavardén (Sarmiento y Mendoza, Rosario), donde el músico recorrerá las doce canciones que conforman su nuevo disco, «Tiempo y lugar».
Once años transcurrieron entre este nuevo lanzamiento y su antecesor, «Fander». En ese tiempo, Fandermole fue dándole forma a obras diversas, con su característica heterogeneidad estilística, su poesía delicada y precisa. Pero fue en los últimos meses cuando ese conjunto de canciones fue tomando forma, invitando al registro de un disco con una sonoridad más despojada. Así lo explica el notable creador: «Fue algo que decidí en lo que va de este año. Intenté grabar cosas que tenía desde hace años, tengo carpetas con grabaciones que hice en pandemia, pero los tiempos se fueron estirando, por la dinámica de cada uno. Y finalmente llego a una edición después de once años del anterior disco, que no es un tiempo propicio para ningún proyecto, pero que tiene que ver con la dinámica que le pude imprimir a mi trabajo. Me parece que también después de la pandemia se fueron dando las cosas. Me di cuenta que parte de ese material que tocarlo solo, el disco se venía perfilando como más austero en cuanto al tratamiento sonoro del repertorio. Después de tanto tiempo de armar y desarmar, de tirar cosas, finalmente me fui quedando con esta idea más austera. Pero tuvo mucho que ver cómo se fue desarrollando el trabajo, las posibilidades personales. Después del tiempo de pandemia, y transcurriendo todo este tiempo de crisis profunda que vamos pasando, eso también define cómo uno va haciendo las cosas».
– ¿Estos contextos también definieron la selección específica de los temas del disco?
– Hay en el disco temas que son anteriores a «Fander», anteriores al 2014, pero la mayoría son posteriores. Incluso algunos temas venían siendo tocados en vivo, pero otros no habían sido tocados nunca. Son cosas que uno va decidiendo sobre la marcha. El tema que le da título al disco, «Tiempo y lugar», es un tema especialmente significativo para mí, porque desde lo cancionístico probablemente es el tema más crítico que puedo ver en el disco, y en mi propio lenguaje. Hace hincapié en estas categorías del espacio y del tiempo que nos toca vivir a cada uno, desde un punto de vista absolutamente crítico. Al ser este tema especialmente significativo, fue el que le termina dando nombre al disco, que no es un disco temático, es heterogéneo en cuanto a lo genérico, pero me pareció una canción significativa.
– Publicar hoy un disco es una postura artística y, también política: cuando el consumo y los algoritmos van dictando otros modos, publicar un disco implica una selección para darle forma a una obra integral.
– Comparto esa visión, sigo sosteniendo la idea de un repertorio completo. Para mí significa en todo caso dejar testimonio del trabajo de una época, y de alguna manera vincular esas canciones entre sí, porque pertenecen también a una visión personal del mundo. Y siguen haciendo referencia al disco físico, que recopilaba una serie de temas que tenían un orden, que uno podía escuchar en ese determinado orden que había propuesto quien hizo el disco. Determinar ese orden lleva tiempo, hay varias cosas que se tienen en cuenta. En este caso me siento bastante aliviado de poder haber terminado el disco, de haber podido editarlo. Además, muy satisfecho por seguir formando parte del catálogo de Shagrada Medra, el sello de Carlos Aguirre y Luis Barbiero. Mis discos anteriores también salieron por ahí, y ellos vienen haciendo un laburo con su sello que me parece muy importante desde el punto de vista de cómo seleccionan su catálogo. Sí, sacar un disco, y sacarlo de cierta manera, es una postura política. En realidad, creo que cada acto humano es un acto político de alguna manera, porque resiste, porque suma a determinadas ideas. Es una manera que define la posición de uno respecto a cuestiones que son ideológicas y estéticas.
