(Txt: Equipo CasArijon) Volvemos a la presencialidad con talleres de teatro, circo, yoga, guión, danza, folclore y taller textil, para todas las edades desde los 6 años. Poco a poco volvemos a la normalidad en nuestras vidas y nuestro espacio cultural del Saladillo (en Rosario) se prepara para recibir a los alumnos un año más.

Mientras vamos pensando en los talleres, reacomodando horarios, a los profes de CasArijon nos pasa de todo por la cabeza. «Estamos con mucha expectativa –cuenta una de las profes–. Ya que no sólo es el reencuentro con nuestros alumnes, sino que además hay talleres nuevos, espacios para mujeres, taller de arte, y muchos eventos, y que la gente del barrio vuelva a acercarse a la casa luego de la pandemia».

«¿Hay algo más lindo que el reencuentro?», dice una de las profes de teatro. Volver al trabajo grupal, a la posibilidad de la creación grupal, donde no solo es importante que los alumnos y alumnas conozcan una disciplina artística y se vinculen con ella, sino que se lleven posibilidades, que crean en ellos, que se permitan expresar, jugar, no criticarse unos a otros ni autocensurarse, y que todos se apoyen en el momento de la creación disfrutando, aceptando el propio cuerpo y el cuerpo de otres.

Esperamos que la gente vuelva a encontrar en los lenguajes artísticos algo de reparación de lo difícil que nos tocó vivir en estos dos años, recuperar el vínculo con quienes damos clases y que CasArijon vuelva a ser un espacio de formación. Volver a poner el cuerpo, a trabajar desde movimiento, vincularse con otre, cuerpo a cuerpo, y encontrar en el lenguaje de la danza o en el circo un lugar expresivo, de desarrollo de la creación.

«Además de enseñar pasos, formas y cuestiones técnicas tratamos de construir una comunidad en el ir y venir de la casa, que el espacio sea amoroso, que haya juegos teatrales, y dinámica grupal», nos cuentan las profes de folclore, el taller más concurrido de CasArijon, en donde vemos a nietos, padres y abuelos de una misma familia.

Desde todas las disciplinas hacemos hincapié en la construcción grupal, en el respeto, en el cuidado de otros cuerpos, y el disfrute de hacer lo que cada uno desea hacer. El compartir, profundizando más los vínculos entre alumnes, entre profes y la casa. Y que podamos revitalizar el espacio luego de la pandemia, para lograr que los espacios sean habitados.