(Texto: Sofía Estanga Burgos) Desde hace años Fernanda Taleb trabaja en la industria cinematográfica. Largometrajes, series e infinidad de proyectos del mundo audiovisual forman parte de su extenso currículum artístico. Ese mismo recorrido es el que la llevó, junto con otras compañeras, a crear lo que denominaron Mujeres de Películas: un grupo de amigas del rubro. «Somos todas mujeres laburantes del cine. Algunas vinculadas a la producción, otras a la asistencia de dirección, el arte, equipos mecánicos e incluso la pata gastronómica. Nos conocimos como consecuencia de participar en distintos proyectos y nos hicimos amigas», explica la cineasta.
Mujeres de Películas se convertiría en mucho más que un grupo de amigas. Un libro de cuentos escrito por Alisa Lein, una de las integrantes, despertaría la inspiración de Taleb. «Cuando lo leí me fascinó y me interpeló muchísimo. Charlamos en algunos encuentros sobre lo bueno que sería adaptar alguno de los cuentos y un día me decidí por uno que me gustaba mucho, que se me volvía muy visual: empezaba a ver las locaciones, los personajes, como lo podía narrar. Finalmente el guioné y se lo presenté al grupo», cuenta la realizadora y agrega: «El nombre del corto es el mismo nombre del cuento: ‘Eco y reverberancia’».
Aprobada por Mujeres de Películas, la idea de llevar adelante el cortometraje comenzó a tomar impulso. Y a medida que el proyecto avanzaba, el vínculo entre Lein y Taleb con la ficción se estrechaba. «El corto tiene ciertas cuestiones autobiográficas de la autora. Ella es arquitecta y las escenas transcurren en una sala de los primeros años de la Siberia, en la Facultad de Arquitectura, aunque filmamos en las aulas del edificio de Comunicación Social de donde yo soy egresada y actualmente docente -explica Taleb-. Entonces de alguna manera los espacios eran super familiares».
«Eco y reberverancia» se ubica cronológicamente en los 90’ y muestra cómo se vivía la facultad en ese momento, lo que termina traduciéndose en un contacto muy estrecho entre la historia del corto y las historias personales de Lein y Taleb. El corto narra la historia de Inés, quien empieza a escribir una carta a su hermano con un relato en primera persona que la muestra frágil y llena de inseguridades, pero también la descubre precisa y decidida al enfrentarse con un vecino abusador. Sobre el tema, la directora explica: «Hay una búsqueda que tiene que ver con cierta inocencia y descubrimiento de esas dudas o incertidumbres que producen los primeros años universitarios, y al mismo tiempo una decisión de mostrar esos inicios sutiles en algunos casos -como en el de la protagonista del corto- de poder enfrentarse a situaciones de abuso que por aquellos años eran muy ninguneadas». «Eco y reverberancia» muestra cómo eran esas reacciones que recién comenzaban a identificarse y señalarse.
Espacio Santafeino
El año 2022 llegó con una buena noticia para la cineasta: el cortometraje se convirtió en ganador de Espacio Santafesino, el programa de estímulo a la producción cultural del Ministerio de Cultura de la provincia de Santa Fe. Al mismo tiempo ganó el concurso de Historias Breves del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales. “El apoyo de la provincia, más el del Incaa sumado a un acompañamiento importantísimo de la UNR en todo lo que tuvo que ver con locaciones, espacios y catering y el apoyo de la Municipalidad de Rosario, nos permitió cumplir el sueño de materializar el proyecto», asegura la guionista.
Taleb está orgullosa de su creación: «Hicimos el corto que deseamos y también de la manera que queríamos filmarlo, trabajando con un equipo alucinante conformado por rosarinos y rosarinas y un elenco también local», afirma y agrega: «Dirigir mi primer ficción a los 47 años con gente que había tenido la posibilidad de laburar durante años y que además de compañeros de trabajo eran amigos, se convirtió en un sueño hecho realidad».
Festival Internacional de Mar del Plata
«Eco y reverberancia» llegó al Festival Internacional de Cine de Mar del Plata el pasado viernes 22 de noviembre. Sobre esta experiencia la directora tiene sentimientos encontrados y separa las sensaciones personales de lo estrictamente profesional. «A título personal, fue super disfrutable porque poder realizar el estreno acompañada de amigos y amigas de Rosario que viajaron para compartir ese momento y ver el corto acompañado de cortos de otras provincias durante la proyección fue un placer. Verlo y escucharlo en sala fue genial», comenta. Sin embargo, tiene una mirada crítica a nivel profesional: «No tuvimos apoyo del Incaa en absoluto para poder viajar y compramos casi todas las entradas del equipo para que pudieran ingresar a ver el largometraje. Además, la presencia de autoridades fue muy mínima», alega, y agrega: «Me parece que en este nuevo modelo de Festival de Mar del Plata lo que se está viviendo es lo que está buscando el gobierno nacional: que desaparezca un poco la imagen del Incaa y que sea un festival totalmente privado, y eso da mucha pena».
Ese sabor agridulce, mezcla de felicidad y desilusión sensibiliza a Taleb. «Estamos en un momento de mucha lucha e incertidumbre en el cine y es un momento muy angustiante. Y aunque vivimos con mucha felicidad este estreno, al mismo tiempo nos planteamos con gran incertidumbre ‘¿qué pasa ahora?’. Hay una situación tan negra para el cine argentino», manifiesta. Ante este sentimiento de desazón, asegura que “las políticas de Estado siempre son bienvenidas y ayudan, por eso, el hecho de que Espacio Santafesino perdure en el tiempo es sumamente gratificante». Orgullosos de haber participado en aquella convocatoria que significó, según la propia directora, el puntapié inicial para que «Eco y reverberancia» haya hecho todo este recorrido, están ansiosos por poder presentarlo en Rosario.
Comprometida con su trabajo y el de sus pares, Taleb defiende la industria: «Esperamos que la implementación de la Ley de Cine en Santa Fe se dé pronto para no depender solamente de un concurso y porque, además, ante un Estado nacional que se plantea totalmente ausente en relación al apoyo hacia el cine y la cultura en general esta ley se convierte en imprescindible para seguir creando historias en la provincia».
Expectante por la resolución de esta propuesta que fue presentada en 2023 por cineastas, técnicos y productoras locales, con el apoyo de organizaciones del sector y de instituciones educativas, y busca impulsar la producción audiovisual local a través de un Fondo de Fomento Provincial, asegura que es una herramienta esencial «para que la industria audiovisual pueda seguir creciendo y construyendo junto a quienes se forman y trabajan comprometidamente en el mercado cinematográfico de la provincia».