Entrevista 16/01/2025

“Hay un doble desafío, una búsqueda en simultáneo entre los puntos en común de las obras de Birri y Guarany”

Pablo José Ayala es el arreglador y director musical de la Delegación que el próximo 1 de febrero presentará en Cosquín un homenaje a los dos artistas santafesinos.

Nacido en Santa Fe en 1977, Pablo José Ayala es guitarrista, compositor y arreglador. Integrante de La Gordini (reconocida propuesta de música para las infancias), y director del sello discográfico Casa de los Ayala, llevó adelante numerosos proyectos artísticos vinculados a la música popular. Convocado por el Ministerio de Cultura provincial, Ayala es además el arreglador y director musical de la Delegación que representará a la provincia en la próxima edición del Festival de Cosquín: el sábado 1 de febrero, la Plaza Próspero Molina será sede para el estreno de un espectáculo que homenajea de Fernando Birri y Horacio Guarany, emblemáticos artistas santafesinos que serán recordados a cien años de sus nacimientos.

Desde su rol de guitarrista, Ayala formará también parte de la banda estable que conformarán artistas provenientes de distintos puntos de la provincia: Andrea García (Esperanza) en batería, Itatí Barrionuevo (Santa Fe) en percusión, Pilar Ferrando (Santa Fe) en bajo, Valentina Rodríguez (Santa Fe) y Sergio Chiconi (Esperanza) en guitarras, Danilo Cernotto (San Justo) en bandoneón y Diego Núñez (Santo Tomé) en saxos soprano y barítono. A esa base se sumarán además las voces de Facundo Arcec (Rosario), Macarena Vera (Bella Italia), Tadeo Di Benedetto (Avellaneda), Maribel Díaz (San Jorge) y Celeste Chatelain (San Tomé), quienes resultaron seleccionados a partir de una convocatoria pública. La presentación se completa con el ballet de 40 integrantes que dirigirán Mariela Frey y Darío Kluczkiewicz, en una puesta que tendrá el desafío de sintetizar las obras de dos artistas referenciales como Birri y Guarany, tal como distinguió el propio Pablo José Ayala.

– El repertorio de Horacio Guarany es muy amplio. El primer gran desafío debe haber sido afrontar la selección de las obras.

– Sí, tal cual. Lo que se buscó desde la puesta en general es contar Birri a través de Guarany. Hay un doble desafío, una búsqueda en simultáneo entre los puntos en común de las obras de Birri y Guarany. Fuimos viendo qué temas tenían en común: el exilio, el regreso a su tierra, varias cuestiones ligadas a temas personales que atravesaron su arte. Después, en la obra de Guarany aparece el vino, pero no lo incluimos desde el lado del vino como un vicio o cierto estado de perdición del hombre, sino más bien el vino que lo vincula al trabajo, a la familia, a los afectos, a la tierra. Hay una entrevista donde Guarany habla de su padre, un hachero muy rústico que trabajaba en La Forestal, y cuenta que el vino lo volvía tierno, que los domingos, que era el día en que estaba en su casa y se tomaba un vino, era el día que jugaba con él y sus hermanos. Aparece ahí el tema del vino en ese vínculo con el espíritu humano. Después también la obra de Horacio está atravesada por las personas, los trabajadores y trabajadoras de esta geografía: aparece el río, el pescador, el paisaje de Alto Verde. La provincia de Santa Fe está muy retratada en su obra. 

– El centenario del nacimiento de Guarany habilita justamente a revisitar su obra y ponerla en evidencia para nuevas generaciones. ¿Es también un objetivo?

– Por un lado, al ponernos a preparar el espectáculo revisitamos toda la obra de Horacio. Escuché la discografía completa, empecé a escuchar la discografía en orden, un disco atrás de otro. Escuché diez discos por día. Yo era fanático de Guarany, en mi familia lo escuchábamos mucho. Y en esta revisión aparecieron muchas músicas poco escuchadas. Porque hubo una mirada general sobre la obra, no nos pasó eso de ir a los hits. Horacio Guarany era una figura muy popular, y muy popular en Cosquín: nosotros estamos preparando un espectáculo específicamente para ese escenario, entonces aparece la tentación de ir a sus grandes éxitos, que en alguna medida pueden parecer ineludibles, pero la posibilidad de revisitar la obra nos permitió elegir temas que incluso no conocíamos, que van a formar parte del repertorio. En ese sentido, estamos poniendo sobre el tapete temas que a partir de esta presentación pueden empezar a caminar fuertemente.

En relación a la sonoridad y abordaje que diagramó sobre esas obras, Ayala detalló: “Cuando me plantearon ser arreglador y director musical, podía elegir el formato del grupo con el que quería tocar. Ahí recurrí a formatos que me han funcionado en otras formaciones, también a sonoridades que probé ocasionalmente pero que uno no siempre tiene la posibilidad de tocar, como en el caso del dúo de saxo y bandoneón, que grabamos en un disco pero con el que no salimos a tocar en vivo. Es un ensamble que funciona muy bien. Y además tenemos el trío de guitarras que era característico de la obra de Guarany. Ahora que ya pasamos del arreglo escrito a los ensayos, se comprueba que está funcionando muy bien y pienso que eso se va a transmitir también. Tenemos una provincia con una calidad de artistas muy buena, tremenda. Da orgullo que estos músicos hayan aceptado ser parte, porque son artistas que admiro profundamente”.

– En el espectáculo participarán además cinco cantantes de distintos puntos de la provincia. ¿Qué podrías apuntar sobre esas voces?

– Este año se decidió que las voces se seleccionen a través de una convocatoria pública. En noviembre tuvimos la oportunidad de recorrer los cinco nodos de la provincia (con audiciones en Santa Fe, Rosario, Venado Tuerto, Avellaneda y Sunchales). Escuchamos a cerca de 60 personas en los nodos y tuve la fortuna de conocer y poder escuchar a muchas voces, propuestas muy hermosas, proyectos de trabajo que no conocía, fue muy gratificante. Al momento de la selección pensamos en voces que se pudieran complementar y eso está funcionando muy bien, en una puesta donde se escuchan además los acentos de toda la provincia, que es algo que también va estar presente.